
¿Sabías que … alimentar con biberón a los neonatos tiene sus secretos?
- Qué suministrar en el biberón?
La creencia de que la leche de vaca o de cabra puede ser un sustituto óptimo de la leche materna para los cachorros recién nacidos no solo es incorrecta, sino que también puede tener consecuencias perjudiciales para la salud de estos jóvenes caninos.
Contrariamente a lo que se podría pensar, la realidad es que la leche de vaca y de cabra son mucho menos adecuadas para los cachorros recién nacidos debido a su contenido significativamente más bajo de energía y minerales. Estos nutrientes son fundamentales para satisfacer las intensas necesidades de crecimiento y desarrollo de los cachorros recién nacidos.
Además, otro aspecto menos conocido pero igualmente importante a tener en cuenta es la osmolalidad de la leche de vaca y de cabra.
En resumen, la osmolalidad se refiere a la concentración de partículas por unidad de agua.
En el caso de la leche de cabra y de vaca, presentan una osmolalidad más alta en comparación con la leche de una perra lactante.
Este desequilibrio puede causar una serie de problemas de salud, siendo la diarrea la más común. La diarrea puede ser especialmente peligrosa para los cachorros recién nacidos. Dado que los cachorros están compuestos aproximadamente por un 82% de agua, cualquier desequilibrio puede llevar a una deshidratación severa, una condición peligrosa que puede ser mortal si no se trata rápidamente.
Todas estas razones explican por qué la solución a buscar cuando se necesita alimentar con biberón a cachorros recién nacidos son las leches maternizadas que están especialmente formuladas para ellos.
A diferencia de la leche de vaca y de cabra, estos productos imitan de cerca el perfil nutricional de la leche materna. Ofrecen una alternativa más completa y equilibrada desde el punto de vista nutricional, proporcionando a los cachorros los nutrientes esenciales que necesitan para un crecimiento y desarrollo saludables
- ¿Cómo preparar la leche sustituta?
La preparación adecuada de las leches maternizadas es de vital importancia cuando se trata de cachorros recién nacidos.
Un error común pero potencialmente peligroso cometido por los dueños es no reconstituir correctamente la fórmula en polvo añadiendo demasiada agua (o muy poca).
Este error, aunque pueda parecer pequeño, puede tener un impacto significativo en la salud de los cachorros.
Un exceso de agua en la mezcla diluye el contenido nutricional de la leche maternizada. Esto puede llevar a la desnutrición en los cachorros, ya que es posible que no estén recibiendo los nutrientes esenciales necesarios para su crecimiento y desarrollo rápido.
Por otro lado, una mezcla demasiado espesa o saturada de agua puede causar problemas gastrointestinales como diarrea y estreñimiento. Esto puede provocar malestar y posibles complicaciones de salud, lo cual es indeseable, especialmente durante las primeras semanas críticas de la vida de un cachorro.
Por lo tanto, no solo se recomienda, sino que es crucial seguir estrictamente las instrucciones del fabricante al preparar una leche maternizada para cachorros.
Esto garantiza que la mezcla resultante proporcione el equilibrio adecuado de nutrientes, calorías e hidratación que los cachorros necesitan para un crecimiento saludable.
Conocer los métodos de preparación correctos es esencial para evitar estos errores comunes pero peligrosos.
- ¿Cómo suministrar el sustituto con biberón?
Otro detalle importante es la técnica de alimentación con biberón. Implementar la técnica adecuada es fundamental para la salud y el bienestar de los cachorros y gatitos recién nacidos, y una parte importante de esto se refiere a la posición correcta para alimentarlos con biberón.
Lamentablemente, muchos propietarios de mascotas continúan cometiendo errores en este aspecto, y estos errores pueden provocar complicaciones.
Instintivamente podríamos pensar en alimentar a un animal recién nacido con biberón de la misma manera que lo haríamos con un bebé humano, sosteniéndolos horizontalmente en nuestros brazos. Sin embargo, esta posición es incorrecta para los cachorros y gatitos.
Este método, aunque adecuado para los bebés humanos, puede causar problemas de falsa deglución en los cachorros y gatitos.
La forma correcta de alimentar con biberón es mantenerlos en posición vertical o en una posición donde su vientre esté en contacto con una superficie, como tus rodillas o el suelo, y donde su cabeza y cuello estén ligeramente elevados.
En esta posición, similar a la que tendrían al alimentarse de su madre, pueden ingerir su comida de manera cómoda y segura.
Esta postura garantiza que la leche fluya naturalmente hacia el esófago debido a la gravedad, previniendo así la falsa deglución.
Esta información es crucial, ya que las buenas prácticas de alimentación tienen un impacto directo en la supervivencia y el crecimiento saludable de los cachorros y gatitos recién nacidos. Por lo tanto, es un mensaje importante para difundir entre los propietarios de mascotas, criadores y amantes de los animales en general. Aún se cometen demasiados errores y debemos crear conciencia para cambiar estas prácticas incorrectas.
Hasta la próxima…